Estrella no conversa mucho en los lugares que ocupa,
por ello pocos comprenden sus emociones y sus sentimientos, visita el mismo
café 2 veces a la semana, y se ubica siempre en la esquina del balcón, sobre la
mesa se le ve un libro distinto cada determinada visita, un bolígrafo negro y
la misma agenda de notas. El personal del café conoce su nombre porque siempre
realiza el mismo pedido, bebida caliente y el emparedado especial de la casa.
En contadas ocasiones algunos hombres han intentado abordarla, con idéntico
resultado a pesar de la diferencia de sus intenciones: Sorbo a su bebida y la
mirada fija en su lectura.
Sus gruesos lentes, su cabello castaño y la
bufanda en su cuello que siempre combina con su piel no pasan desapercibidos
para los asistentes del lugar. Hay almas que aún ensimismadas atraen la
atención de quienes se fijan en los detalles. A Estrella podría rodearla una
multitud en una plaza, aun así las miradas de los observadores se posarían en
ella.
En sus apuntes resaltan diversas correcciones,
algunos post-it resaltan en las esquinas de las páginas; escribir un libro te
obliga a reinventar constantemente a tus personajes, a revaluar las
situaciones, y a verificar una y otra vez la coherencia de tu historia. Es una
evolución constante, una lucha entre tus deseos y la obra que has creado, una
catarsis que requiere mucha cafeína sino deseas recaer en el vicio liberador
del cigarrillo.
Estrella ha definido el móvil del asesinato,
encontró el modo de descubrir el único cabo suelto que siguió su detective,
solo le falta conocer al asesino de su historia.
Otro sorbo a su bebida, y la mirada fija en su
lectura.
Estrella: Café y Especial de la casa |
Bonita frase "Hay almas que aún ensimismadas atraen la atención de quienes se fijan en los detalles"
ResponderEliminarMe encanta tu manera de escribir :)