Esa canción

La música tiene ese don de expresar todo lo que, incluso nosotros, no hemos podido descifrar…Por eso la respetamos tanto y admiramos a aquellos artistas que las componen e interpretan, pues con sus letras y melodías nos llenan de sentimiento y, muchas veces, nos guían y le dan un sentido a nuestra vida.

De allí que siempre dediquemos una canción especial a un ser querido, que sonriamos cada vez que nuestro reproductor nos consiente con uno de nuestros temas favoritos…Que nos llenemos de nostalgia cuando algunas letras nos recuerden una historia de nuestra vida o que simplemente nos perdamos entre notas mientras deambulamos por la ciudad.

Y dedique canciones:

Dedicar una canción es congelar un momento, es envolverlo en recuerdos que jamás olvidaremos (Piensa en algún tema que te hayan dedicado, deja que suene…Y recordarás ese momento)  Es dejar una marca en nuestro baúl de los recuerdos, cuya llave puede encontrarnos cada vez que el tiempo y el destino plazcan…Pero: ¿Si dedicamos canciones, si entregamos todo y no funciona?  Me ha pasado, dedique una de mis canciones favoritas, una muy especial, y la vida se encargó de encerrar mi nostalgia en 4 minutos de sentimiento, en los cuales recorro por completo la montaña rusa de mis emociones, cuyas subidas y bajadas son tan drásticas que solo me convierten en una marioneta a merced de un indiferente titiritero.

Luego…Volví a hacerlo; y, con la lógica de que “Entre más alta sea la expectativa, más duro será el golpe” en mi contra, me estrelle…Dirá mi conciencia que es el pago a mis errores del pasado (Eso ya son solo cuentos)  Pero; Esta vez no pague solo yo, pago una canción, pago quien no debía hacerlo…

Desde entonces he pensado en no volver a dedicar canciones, muchos dicen que una canción dedicada, a futuro, es una canción arruinada…Tienen razón

Amores aquí, desamores allá

Una y otra vez las redes sociales me inundan con los amores y desamores de quienes me rodean, con la felicidad y el derroche de amor de unos cuantos, y las quejas, las desgracias, y el dolor de la mayoría…Siempre son los mismos 140 caracteres, el mismo estado, la misma etiqueta, y las mismas fotos, lo único que cambia es la persona que lo escribe.

“¿Y tienes novi@?” Pregunta que es divertido hacerle a un/a niñ@ de seis años. @Es_así

Rondan esas palabras y esos recuerdos, aquella inevitable impotencia de quienes sabemos que han querido de verdad: “ver a quien quieres con alguien que no la merece”; las mentiras y los juegos de quienes no le dan valor a sus palabras, y también, de quienes no valoran los sentimientos: “X te amo…XX me gustas, XY siento algo muy especial por ti”; Llega también el sarcasmo para los buenos: “Es irónico que quienes aman sinceramente sean aquellos a quienes no quieren”; y también el sarcasmo para lo absurdo: “Niñas de 14 años con el corazón roto por tercera vez, a mis 14 años solo se me rompían los brazos de mis juguetes”

Esto, sin hablar de cada teoría, excusa, pensamiento y decisión al momento de ocultar lo que sienten y explicar su estado civil:

- “Estado civil: Se conocieron el sábado en el bar”
- “Estado civil: ¡Lotería! Digo…Solterita”
- “Estado civil: En el hoyo y sigo cavando”
- “Estado civil: Felizmente desemplead@”
- “Estado civil: Esperando que me recuerdes”
- “Estado civil: Quiero ser el único que te muerda la boca”

¿Se sabe más?  Por favor ayúdeme comentándolos

¡Ah por cierto!  ¿Y el mío qué? Pues:
 - “Estado civil: Mi gusto es demasiado exquisito”

Ella

Estaba mirando las nubes, están tan calmadas…Son tan libres…

Solo escuche su voz, era tan cálida y amable…Me pregunto: ¿A quién esperas?
- “La estoy esperando a ella” – Le dije, mientras contemplaba el azul celeste sobre las nubes
- ¿Y por qué a ella?
- “Porque ella tiene defectos”

- Se sorprendió, pues no lo entendía -
- Si tiene defectos… ¿No es mejor esperar a otra? Si tiene defectos no será feliz todo el tiempo.
- “No, es así como la espero…No quiero a alguien que esté feliz todo el tiempo, nadie lo está, eso es una máscara para evadir los prejuicios, ella tiene un poco de amargura, eso me demuestra que está viva”

- Sentí un cambio en su voz, se notaba algo triste…Parecía que había recordado algo doloroso -
- Los seres vivos buscan la perfección, pasan su vida buscándola.
- “Ella no, no lo es, no tiene un maquillaje perfecto ni un cabello recién salido de la peluquería más costosa…Ella tiene la confianza para sentirse tranquila con su cuerpo, ¿Sabes? a veces una figura perfecta es tortuosa”

- ¡Lo sé! – Grito mientras reía…Su sonrisa amable había vuelto…
- Entonces… Ya tuviste la oportunidad de verla ¿Verdad?
- “Si, pude verla, llevaba babuchas, y había estado en pijama todo el día, tenía un saco sin lavar, y estaba comiendo en su cama mientras veía una película”

- Ahora ambos reíamos…Había comprendido lo que sentía -
- Ella...Es un ser humano, sin embargo, a diferencia de los demás...Tiene mucha confianza en sí misma
- “Si, es descomplicada, no tiene prejuicios, y es feliz sin ser perfecta”

- Me alegro por ti…Hay muchos que aún siguen vivos, y están sufriendo, pues no han podido ver lo que tu acabas de decirme…Aunque hay algo que todavía no me dices… ¿Cuál es su nombre?
- “¿Su nombre...?”

Su nombre…Nunca supe su nombre.